Los crustáceos como langostinos, cangrejos, gambas, cigalas…tienen un caparazón que los protege y evoluciona a medida que ellos crecen.
El marisco fresco y en buen estado presenta siempre un agradable olor a mar.
Índice
En marisco vivo
Se sabe que los crustáceos son frescos si cuando se meten en agua salada se reaniman. Otro truco es ver si cuando los agarras se mueven instintivamente.
En marisco refrigerado
Podremos comprobar si está fresco si la cabeza mantiene un aspecto translúcido y ligeramente verdoso y el caparazón muy suave al tacto.
En marisco congelado
Las piezas deben estar íntegras, con la carne de aspecto similar a la fresca.
En mariscos cocidos
La cáscara o caparazón debe estar rosado o rojo vivo sin manchas (verdes o negras). Si cola y patas están replegadas, indica que el marisco se coció estando vivo.
Todos deben desprender un olor agradable a mar, indicativo de que están frescos.